La inseguridad se situó en este año como la principal preocupación de los dominicanos. Si a esto le sumamos, que las autoridades han perdido credibilidad en la población, debido a distintas situaciones que se han presentado, en donde la acción de la Policía ha suscitado actos de violencia, se ha evidenciado la falta de respeto y han surgido opiniones encontradas en torno a la forma de proceder de las autoridades ante actos delictivos, tenemos bastante para pensar.
Hace falta mayor eficacia a la hora de actuar en contra de los delincuentes, ya que parte de los problemas, surgen principalmente por la reacción tardía de los uniformados, la cual molesta a las comunidades afectadas y en muchas ocasiones terminan haciendo justicia con sus propias manos.
Ante una sociedad que no puede esperar más para ser escuchada y atendida, frente a las olas delictivas a la que se enfrenta la República Dominicana, hace notoria y más que evidente la necesidad que tiene la población de tener a su servicio un organismo de seguridad nacional en que pueda confiar, a sabiendas de que al presentar un caso ante la justicia obtenga una respuesta imparcial y objetiva.
Ahora, que recibimos un año nuevo, empieza a vislumbrar un pequeño atisbo de esperanza en la población. Es cuando se hace indispensable crear un nuevo sistema de respuesta policial, renovar la imagen de este organismo y trabajar arduamente para recobrar la confianza de los ciudadanos.
APUPRENSA/Ariela Guerra
No hay comentarios:
Publicar un comentario